miércoles, 17 de diciembre de 2008

Camiseta suplente con números pintados a mano (1984)


Es muy probable que esta foto simbolice nada más y nada menos que el peor momento de la historía de Boca. Y es recordada por todos los boquenses y los que no lo son. Corría la primera rueda del Metropolitano 1984 y Atlanta llegó a la Bombonera con un joven Alfredo Graciani como figura.
Lo concreto es que al pedido del árbitro (y la TV) de cambiar la camiseta por la semejanza de colores, la utilería de Boca entró en estado de pánico. No había juego de camisetas suplentes y se debió recurrir a camisetas de entrenamiento. Como obviamente no tenían números en la espalda y ante el apuro por solucionar el tema y no perder los puntos, se decidió pintar los números con marcadores. La transpiración de los esforzados juveniles boquenses quedó a la vista de propios y extraños. Ese domingo, haber perdido 1-2 fue lo de menos.