Carlos Manuel Morete era un goleador de raza. Histórico artillero de River, también infló redes a lo pavo vistiendo las camisetas de Talleres de Córdoba, Independiente y Argentinos. Hizo goles en todos lados. Menos en Boca.
El “Puma” llegó en 1981 y nunca pudo ganarse el puesto. Alternaba en el once titular y con medio campeonato transcurrido, el problema de Morete ya no era la poca cantidad de goles hechos, sino los que erraba. Pifiaba cada uno que mama mía. Hasta con el arco solo le costaba meterla al “Puma”. Obviamente finalizado ese Metropolitano tuvo que hacer urgente las valijas dejando la escasa marca de 3 goles en 18 partidos. Pobrísimo.