Los clubes, por ahora siguen siendo asociaciones civiles sin fines de lucro. Y es por eso que entre sus misiones, está cierta cuota de compromiso social. Es por eso que estar al pie del cañón en movidas solidarias es algo que llena de orgullo. No así en lo deportivo (?), ya que un partido contra Estudiantes de Buenos Aires en Caseros, no parece a priori el mejor programa.
Pero hacia allí fue el Boca de Aimar el 13 de septiembre de 1990 a jugar un amistoso a beneficio del Pincha de la B que estaba construyendo complejo educacional que consistía en una escuela técnica más un comedor infantil.
Las boleterías reventaron dejando 50 millones de australes en una época donde, para que tengamos una idea, la popular para Boca vs Chaco For Ever a jugar 72 horas más tarde valía 30.000 australes.
Boca afrontó el partido con una formación mixta entre titulares y suplentes. Pero los que no jugaron como por ejemplo Simón, Navarro Montoya, Tapia y Abramovich estuvieron parados al lado de la línea de cal firmando autógrafos toda la tarde.
El gran ausente fue el Búfalo Funes, quien por esas horas estaba a punto de debutar en Boca. Cosa que como todos sabemos, jamás pasó.
El Pincha puso todo su once titular que venía de empatar con Los Andes y se las rebuscó para empatar el partido nada menos que con un gol olímpico tras una flojita tenaza (?) del Gringo Pogany. En la foto vemos el gol del Turco Apud.
Los alineados por el Cai Aimar fueron Pogany, Lépez, Musladini, Hrabina, Moya, Soñora, Villarreal, Apud, Latorre, Batistuta y Pico.