Corría 1977 y Boca, con el bicampeonato argentino obtenido en 1976 bajo la dirección de Juan Carlos Toto Lorenzo, encaraba el sueño que desvelaba a su verborrágico presidente Alberto J. Armando: la Copa Libertadores de América. Como era costumbre en Lorenzo, se armó un plantel donde iban a desfilar gran cantidad de jugadores entre nuevos y chicos, más los que venían de la temporada anterior. Porque como siempre, la onda es poner equipos alternativos en los torneos locales.
Así se incorporaron Daniel Pavón, Carlos Ortiz, Roberto Carballo, Carlos Silguero, Aníbal Cibeyra y alguien que volvia de España siendo gran figura, campeón de liga y Copa Intercontinental con Atlético de Madrid: el brasileño Heraldo Bezerra Núñez, un puntero izquierdo habilidoso, buen cabeceador y goleador que comprado por Newell’s a Cruzeiro en 1968, vistió la camiseta rosarina hasta 1971 donde fue vendido a España.
Bezerra nació el 21 de abril de 1946 en San Jerónimo, Brasil, ciudad cercana a Porto Alegre. Pienso que la delantera exitosa que formó en Newell’s compartida con Mario Zanabria, gran figura del equipo del Toto, más el conocimiento que Lorenzo tenía por haberlo dirigido en Atlético Madrid aceleraron su venida a Boca, que estaba por negociar a España al titular de ese puesto, Darío Felman.
Sólo 2 partidos jugó el apodado Loco Bezerra. La segunda fecha del Metropolitano 77, en una formación completamente alternativa con la que Boca derrotó a Banfield 2 a 1 en la Bombonera el 6 de marzo siendo reemplazado por Daniel Pavón. Y una semana después con un equipo mezcla de titulares y suplentes el 13 de marzo de 1977, con el cual Boca cayó en La Plata 0-2 frente a Estudiantes y ahí Bezerra entró reemplazando a Darío Felman.
Horas después, en la madrugada del 14 de marzo, como suele pasar hasta hoy en día, Bezerra murió en un accidente sobre la ruta Panamericana rumbo a Rosario a la altura de Campana.
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Autor invitado: Miguel Sarfson (2009)