martes, 27 de octubre de 2009

El gol en contra del Colorado Suárez contra Atlético Tucumán en 1981


Para la tranquilidad de Julio César Cáceres, él no fue el primero ni va a ser el último defensor de Boca ducho (?) en eso de meter la pelota en el arco propio. Y no es por defender al paraguayo ni mucho menos, pero sus conquistas en el arco de Caranta no existen, comparadas con la faena (?) realizada por el Colorado Suárez el 25 de octubre de 1981.
Esa tarde, por la fecha nueve del campeonato Nacional, Boca recibió en la Bombonera a Atlético Tucumán tratando de vengar la derrota 0-1 de la primera rueda y, más que nada, de sumar dos puntos claves para la clasificación.
Con el partido 0-0 y en un trámite mucho más parejo de lo imaginado, el últmo minuto del primer tiempo fue la hora señalada para ver un flor de macanón del cuatro de Boca. Hoy día lo llamaríamos blooper, pero en aquel momento no existían esos tecnicismos (?).
Tras un pelotazo largo de los tucumanos sobre el área de Boca, corrieron apareados Candedo y el Colorado Suárez. Remató el delantero, Suárez tapó con la pierna y la pelota quedó boyando. Ante la arremetida de Candedo, el defensor boquense la quiso poner en órbita y despejar lejos, pero lo único que hizo fue meter un zurdazo tres dedos que tras elevarse a unos seis o siete metros de altura, hizo una comba hacia el arco de Boca y superó de emboquillada la lenta salida de la Pantera Rodríguez. La pelota cayó, picó casi sobre la línea y se clavó en el ángulo del arco que da al Riachuelo.
Al baldazo helado de ver a los tucumanos ganando en La Boca se sumó, desde ya, la forma. Por suerte para Suárez, Maradona y Gareca dieron vuelta el resultado en los últimos minutos y lo dejaron un poquito mejor parado. Pero sólo un poquito.