No descubrimos nada si decimos que Jorge Alberto Comas era un delantero de la reputísima madre. Y entre sus muchísimas cualidades como oportunismo, definición, picardía, desborde, velocidad se destacaba una pegada tremenda desde su botín zurdo. No tanto por la violencia como sí por la precisión y efecto que le enroscaba a la bocha. Cosa que hay que reconocerla por más que cuente en sus fojas con aquel maldito penal tirado a las nubes en cancha de River a fines de 1987.
Así que si hablamos de sus envenenados zurdazos hay que hacer una parada obligada en el verano de 1988. Con toda la esperanza a cuestas por el incipiente ciclo Pastoriza que daba sus primeros pasos, un Comitas con pelo corto tras guillotinar su cubana, le tomó el gustito a la pelota parada e hizo estragos pateando corners en Mar del Plata durante la Copa de Oro.
Primero embocó a Fillol el 14 de enero en el Boca 2 Racing 2. Y más tarde, el 23 de febrero, lo humilló a Nery Pumpido que la canchereó poniendo al Tapón Gordillo en el primer palo en el Boca 2 River 1, definido con una recordada emboquillada de Milton Melgar.
Lo loco (?) es que ambos goles olímpicos fueron a los 43 del primer tiempo, en corners disparados desde la derecha del ataque boquense y con las pelotas ingresando arriba en el primer palo, no sin antes obligar a ambos arqueros a incrustarse contra la red del costado..
.Gracias a Boca Videos