Nunca jugó oficialmente, apenas estuvo en 4 amistosos. No dejó huella en el club. Probablemente (?) algunos hinchas no recuerden su apellido y mucho menos su cara. Pero por lo menos, David Alejandro Reano se dio el gusto de recorrer el mundo defendiendo la camiseta de Boca. Anotemos: Denver, San Francisco, Japón y Old Trafford. No cualquiera.
Semejante tour fue posible de la mano de Brindisi, nuevo técnico de Boca por aquel mediados de 2004. Pero nada que reprocharle a un Miguelito recién llegado, que apenas si tuvo tiempo para bajarle el pulgar al Flaco Vivaldo y tuvo que embarcarse en una de esas giras de pretemporada marca registrada de la gestión Macri. Las que tanto le gustaban a Bianchi (?).
Las presentaciones del xeneize en dicha gira servían para que Brindisi mirara, evaluara y tomara decisiones. Por eso la danza de nombres fue imparable. El 21 de julio, nuestro homenajeado formó zaga titular frente a las Chivas en el Ivesco Field de Denver, junto a Jerez, César el Beto González y el interminable Pampa Calvo. Hay que hace una salvedad. Esa misma jornada se empezó a notar el gusto del DT por la línea de tres. Así que la subida de Calvo casi a mitad de cancha dejó a nuestro corpulento defensor algo expuesto. Pero sigamos.
Unas 48 horas más tarde contra el América de México en la ciudad de San Francisco, entró por Calvo en el entretiempo e hizo las veces de carrilero. Eso y tirarle un bidón de nafta encima fue más o menos lo mismo. Los tres del fondo fueron Jerez, Schiavi y el Beto González. Aunque en el segundo tiempo también tuvo su chance Pablo Álvarez.
Un par de días después, ya en Japón frente al Albirex Nigata, Reano volvió a la zaga nada menos que junto al Flaco Schiavi. Tal vez la envergadura del rival no diera para sacar conclusiones muy serias. Para colmo el regreso de Martín Palermo a Boca tras su experiencia europea, eclipsó todo lo demás.
Así llegamos al 5 de agosto de 2004, fecha en que Boca y PSV de Holanda jugaron por la Copa Vodafone en el mítico Old Trafford de Inglaterra. Triunfo boquense por 1-0 y al mismo tiempo despedida de Reano mientras se alistaban los Traverso, Matellán y Schiavi para ser titulares en un semestre que iba a ser turbulento.
Llegados a la Argentina, si bien tuvo presencia en varios partidos de reserva, terminó desapareciendo de un día para el otro sin llegar a tener la chance de mostrarse oficialmente. Nacido en Villa María, Córdoba, en marzo de 1984, dicen los que saben (?) que más tarde anduvo por Aldosivi de Mar del Plata.